Salteado de calabacín, cebolla, tomate y huevo
Este salteado es una preparación rápida y sencilla.
Lo hice porque iba a comer sola y me puse a mirar en el frigorífico a ver qué tenía para aprovechar.
Encontré todos estos ingredientes, los que están en el título, y con ellos preparé un salteado super rico y de bajas calorías.
Muchas veces nos pasa. En muchas ocasiones hacemos comidas juntando restos de otras o aprovechando lo que esté a punto de caducarse o estropearse. Eso es lo que siempre se ha hecho, lo que me han enseñado de pequeña. Casi siempre es cuestión de echarle imaginación y cariño y nos saldrán buenos platos. Así aprovechamos todo, evitamos tirar alimentos, eliminamos basura y somos más sostenibles, a la par que ahorramos.
En este blog hay platos de este tipo (de aprovechamiento) y otros muchos que tengo en mente poner, sobre todo de los que hacía mi madre.
Ingredientes para 1 comensal
- 1/2 calabacín
- 1/4 cebolla mediana
- 1 tomate maduro
- 1 huevo L
- 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
- sal y pimienta
- orégano fresco
Este plato lo he publicado en un vídeo en mi canal de youTube.
Cómo se hace el Salteado de calabacín, cebolla, tomate y huevo:
Comienzo lavando el medio calabacín y cortándolo a rodajas, sin pelarlo.
Le quito a la cebolla las telillas y cojo un trozo que corto a tiritas finas.
En una sartén amplia pongo la cucharada de aceite de oliva virgen extra (aove) y con una brocha de silicona reparto el aove por toda la superficie.
En cuanto esté caliente el aove, echo la cebolla y la salteo con una pizca de sal. Cuando esté casi hecha, la paso a un lado de la sartén y pongo las rodajas de calabacín a que se tuesten ligeramente por ambos lados.
Mientras tanto, lavo el tomate y lo corto a rodajas. Bueno, en realidad usé 2 tomates pequeños que estaban blandos, pero en circunstancias normales y siendo tomates medianos, para mi sola pongo uno.
Cuando el calabacín está hecho lo paso también a un lado y pongo las rodajas de tomate a saltear. Cuando veamos que un lado está hecho le damos la vuelta para que se hagan por el otro. Ponemos una poquita de sal por encima.
Observad que al calabacín no le he puesto sal, pues queda aún en la sartén de la que eché a la cebolla.
Como el tomate suelta jugo, lo aprovecho para poner el huevo encima a escalfar. Le pongo orégano fresco por encima, de mi maceta, que tengo varias con aromáticas. Si no lo tenéis ponedlo seco, o albahaca, por ejemplo.
También pongo pimienta. Yo la prefiero de colores con molinillo. Lo digo en casi todas mis recetas. Me encanta el gusto que le da a los platos y al usar pimienta se nota menos la falta de sal. Las pimientas en general y más si van combinadas varias, potencian el sabor de los alimentos.
Para que se haga mejor el huevo, si os gusta más hecho, se puede tapar unos 2 minutos y lo tenemos listo para comer.
Como veis es un plato que se puede hacer en unos 15 o 20 minutos y que admite variaciones. Con berenjenas, por ejemplo, salen exquisitas este tipo de preparaciones, pero ese día no tenía.
También tengo publicado el vídeo en mi Instagram.
Os animo a que paséis por mis redes.
Agradezco vuestros comentarios. Los contesto todos. Gracias por visitarme.