El flamenquín es una especialidad típica de Córdoba. Su origen es algo incierto, pues se le atribuye a Bujalance. Otros lo sitúan en Córdoba, en una especialidad de un antiguo y desaparecido bar de Tapas en la calle Concepción de Córdoba, el Florida, donde se hacía pequeño y de ternera.

En mi casa cuando yo era pequeña lo hacía mi madre así, con ternera muy finita, y relleno con jamón serrano y tocino del mismo jamón.

Con el tiempo se ha ido cambiando y se generalizó hacerlo con filete del jamón fresco del cerdo, o con lomo. O con pechuga de pollo. Se requiere un filete grande y fino. O varios superpuetos para llegar al largo que queramos.

Flamenquín cordobés paso a paso:

Aplanar un filete muy fino del jamón de cerdo (fresco) o de pechuga de pollo. Es indispensable que con un peso o la maja de un mortero se aplane. Es para dejarlo mas fino y también para romper las fibras y dejarlo mas tierno.

Ponerle un poquita de sal fina.

Rellenar con 1 tira de jamón serrano y con otra tira de tocino del jamón, o con láminas finas de jamón, que es como yo suelo hacerlo por aquello de las calorías.

Se cierra haciendo un rulo, apretando bien con las manos. Se pasa por huevo batido y pan rallado.

Si queremos que quede mas compacta la costra, volvemos a pasarlo por huevo y pan rallado y le apretamos bien, dándole bonita forma.

Hay que freirlo en abundante aceite, mejor en freidora y cuidando que se haga bien por dentro y no se queme por fuera, por lo que el aceite no debe estar muy fuerte. A unos 160º. Yo siempre los frio con aceite de oliva virgen extra, porque absorbe menos y aporta mas crujiente y mas sabor.

La guarnición es a gusto de cada uno. Normalmente mayonesa, lechuga y tomate. Yo pongo lo que tenga en ese momento. En los restaurantes suelen ponerlo con ensalada y patatas fritas. Y siempre con mayonesa.

Con salmorejo están delicioso.

 Espero que te haya gustado y si tienes alguna pregunta me la pases por los comentarios, que están debajo de esta entrada.