CARRILLADAS DE CERDO EN SALSA DE VINO TINTO
Las hago siempre enteras, así son mas bonitas de presentar y fáciles de porcionar.
La salsa de vino tinto les da un sabor muy especial y siempre usaremos un buen Aove y un vino tinto de calidad para darles un sabor exquisito.
La ejecución de la receta no puede ser mas sencilla y ya veis por las fotos que el resultado también es muy bueno, ideal para una mesa festiva.
Ingredientes para 6 comensales
- 1 kg. de carrilladas de cerdo ibérico
- 1 pimiento rojo mediano
- 1 tomate grande maduro
- 1 cebolla añeja
- 3 dientes de ajo
- 1 hoja de laurel
- 150 dl. de aceite de Oliva Virgen Extra
- 125 dl. de vino tinto de calidad
- pimienta de colores recién molida
- sal
Como hacer las carrilladas de cerdo en salsa de vino tinto:
Comenzamos limpiando de grasa las carrilladas y después las pasamos por agua y las dejamos escurrir en una pasadera.
Preparamos un fondo de olla con las hortalizas. Las lavamos, pelamos el tomate y lo trocemos pequeñito. También troceamos pequeñitos pimiento, cebolla y ajos. Hacemos un sofrito con todo en una sartén amplia con 2 o 3 cucharadas de AOVE o directamente en la olla, que es como yo lo hago.
Añadimos las carrilladas, las salteamos y cuando estén algo doraditas le ponemos el laurel, la pimienta y la sal.
Cuando estén hirviendo fuerte le ponemos el vino tinto y a olla abierta y dejamos que evapore a media potencia.
Cuando haya evaporado el vino le ponemos agua caliente en cantidad suficiente según la olla que tengáis. También podéis poner un caldo casero suave de pollo o de verduras.
Yo las pongo en olla rápida y necesitan poco líquido, pero cada uno conoce su olla y lo que necesita.
Tapamos la olla y digo como antes: el tiempo depende del tipo de olla.
Tened en cuenta que las carrilladas son tiernas y en olla a presión en 20 min. como media estarían tiernas, pero es mejor quedarse cortos para que no se nos deshagan. Se abre la olla y si necesitan mas tiempo, se vuelven a poner.
También es conveniente cuando abramos la olla repasar el fondo con una cuchara de madera y moverlo suavemente. Esto puede evitar que la salsa se pegue al fondo.
Cuando estén tiernas las ponemos a fuego fuerte o medio con la olla destapada, hasta que se nos queden con la salsa al espesor que mas nos guste.
También podéis hacerlas de un día para otro y dejar este último paso para antes de servirlas. Personalmente me gustan mas hechas con anticipación, uno o dos días antes de que las vaya a servir. Están mucho mas buenas porque cogen todos los sabores.La guardo en un hermético en el frigorífico.
En ese caso siempre dejo la salsa sin reducir y les doy el punto justo antes de servirlas.
Otra forma de prepararlas es poniendo el día anterior las carrilladas o carrilleras en un adobo con el vino tinto y las especias.
Si no encontráis carrillada ibérica también salen muy buenas con carrillada de cerdo blanco.
La preparación es la misma, aunque puede que necesiten mas tiempo de cocción.
Acompañamientos sugeridos:
Arroz blanco, patatas fritas, patatas a lo pobre, puré de patatas, utilizando siempre en las preparaciones un buen Aceite de Oliva Virgen Extra.Las sirvo siempre con su salsa y con unas ramitas de alguna hierba. En esta ocasión tenía tomillo-limón fresco.
Aparte, en una salsera sirvo el resto de la salsa y en platos diferentes los acompañamientos.
Agradezco tu visita y si tienes alguna pregunta sobre esta receta te la contestaré a través del formulario de comentarios.