Rumex acetosa es una planta del género Rumex, nativa de Europa y recogida en algunas zonas de campo por sus hojas comestibles. Tiene una gran variedad de nombres comunes, entre ellos, acedera común y vinagrera.

Son de color verde oscuro, apagado, con filos rojizos como oxidados y al tacto son ásperas, algo bastas, pero cuando se cuecen (muy poco, solo unos minutos) se ponen finísimas.

Cómo se hacen las vinagreras agridulces:

Se limpian quitándoles el rabito y se lavan muy bien. Se trocean y se cuecen preferiblemente en olla destapada, a fuego fuerte: Se cubren de agua y cuando empiezan a hervir se revuelven con una paletilla para que cuezan por igual. Se cuentan 4 o 5 minutos (depende de la cantidad).

Apagamos el fuego, sacamos una hoja y si vemos que está cocida, las colamos. Si aún está algo tersa las tapamos y dejamos unos 5 minutos más en el agua hirviendo. No hace falta volverlas a poner al fuego.

Ya he dicho en varias ocasiones que cuezo las verduras sin sal para aprovechar el agua en el riego de mis flores, por lo que las cuelo siempre recogiendo el agua en un recipiente. 

Utilicé ajos muy picaditos, fritos en aceite de oliva virgen extra, por supuesto, porque les da un sabor muy bueno, y cuando estuvieron dorados, agregué las vinagreras ya cocidas y coladas, rehogándolas bien con una poca de sal. Cuando ya casi estaban, les puse una mezcla con una cucharadita de miel y otra de vinagre de manzana. Esto les va a dar el toque agridulce. Si os gusta éste gusto mas intenso, poner una cucharada sopera de cada uno.

Se sigue rehogando hasta que queden a vuestro gusto.

Son muy finas y quedan con su salsa trabada, como veis en la foto.