Spaguetti tricolor con salchichas y hortalizas
Esta forma de cocinar los spaguetti, aparte de que están muy buenos, son especialmente nutritivos, no solo por la composición que lleva la pasta que les aporta un porcentaje de verdura, también por los ingredientes que he usado.
No llevan queso, así pueden consumirlos los intolerantes a la lactosa.
Tampoco llevan tomate, aunque si os gusta le sientan muy bien unos trocitos de tomate seco. Yo no le puse porque no tenía en ese momento.
Ingredientes para 2 comensales
- 200 g. de spaguetti tricolor
- 1/2 pimiento rojo
- 1 puerro con la parte verde
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 2 salchichas (o mas según tamaño)
- sal al gusto
- Condimentos secos:
- ajo granulado
- cebolla en escamas
- pimienta de colores recién molida
- orégano seco
- Opcional: orégano fresco
Las salchichas que he usado son de las Bratwurst (salchicha blanca del tipo de Baviera), pero cualquier tipo de salchicha que os guste puede servir. Yo he puesto 2 (una por comensal) porque son grandes y gorditas.
Los ingredientes secos le aportan un extra de sabor, por eso hay que usar muy poca cantidad de cada uno.
Cómo se hacen los Spaguetti tricolor con salchichas y hortalizas:
Comenzamos preparando el sofrito:
Lavamos el pimiento rojo. Suelen ser grandes, por lo que solo he usado la mitad de una pieza. Lo picamos a tiras cortas o a cuadraditos.
Lavamos muy bien el puerro, que siempre tienen tierra en el interior. Vamos a aprovechar todo lo que podamos de la parte verde. Lo picamos también.
En una sartén amplia ponemos el aceite de oliva virgen extra (AOVE) y en cuanto esté caliente echamos el pimiento y el puerro, ponemos una pizca de sal (hay que tener en cuenta que las salchichas aportan sal). Salteamos.
Cuando estén a medio freír ponemos las salchichas cortadas en rodajas más o menos finas, según el gusto.
Seguimos salteando unos minutos hasta que esté hecho el sofrito y le echamos los ingredientes secos: ajo granulado, cebolla granulada o en escamas, orégano y dos o tres vueltas de molinillo de pimientas de colores. Con unos segundos más que tardemos en revolverlo es suficiente, pues si los dejamos freír, se tuestan enseguida.
Como tengo orégano fresco, yo le pongo también algunas hojitas y guardo unas ramas para adornar los platos.
Cómo se cuece la pasta:
La forma tradicional de cocinar la pasta es hacerla al dente. Hay que leer las instrucciones del paquete en cuanto al tiempo que necesitan de cocción.
Se utiliza una olla alta, donde entre bien la pasta. Como norma general, por cada ½ kilo de pasta se emplea 1 litro de agua y 2 cucharadas rasas de sal.
Seguimos con la receta:
Ponemos al fuego la olla con el agua y con una cucharada escasa de sal.
Cuando esté el agua hirviendo, ponemos los spaguettis y vamos empujando poco a poco para que conformen vayan ablandándose, entren bien en la olla. Hay que removerlos varias veces para que no se peguen unos con otros.
Estos spaguettis son muy finos y solo necesitan 3 minutos de cocción.
Cuando estén al dente, los escurrimos el agua y los pasamos a la sartén donde tenemos el sofrito.
Los mezclamos muy bien, que cojan todo el sabor.
Rectificamos de sal y servimos inmediatamente.
Os aseguro que de esta forma son muy rápidos de hacer y están muy buenos, muy sabrosos.
Como dije antes, para servir los platos les he puesto una ramita de orégano fresco.