Fabada asturiana tradicional
#DiadelaFabada - VII Ruta de la Fabada
Las diferentes actividades en torno a esta celebración giran en torno al Año Santo Xacobeo, siendo Santiago de Compostela ciudad hermanada con Oviedo, que es origen del camino de Santiago y se está haciendo esta ruta por ese camino.
Se elaborarán fabadas solidarias en Oviedo, Santiago de Compostela, Madrid, Lanzarote y Nueva York. Demostraciones y masterclass en directo, por plataformas de streaming, de la elaboración de la fabada asturiana y platos de fabes por grandes cocineros de Asturias, Madrid, Nueva York, Miami, México o Dubái, entre otros.
Cómo se hace la fabada asturiana tradicional:
Ponemos la tarde anterior las fabes a remojo en abundante agua fría. Me gusta removerlas de vez en cuando, será mania mía, pero creo que así se remojan por igual por el gran tamaño que tienen. Al dia siguiente, antes de cocinarlas, las colamos, retirando el agua y las ponemos en una cazuela a hervir cubiertas de agua fría.
Ingredientes para 4 comensales
- 500 g de fabes
- 150 g de panceta curada asturiana
- 150 g. de lacón curado
- 2 chorizos asturianos
- 1 morcilla asturiana
- 1 sobre de azafrán natural molido
- Agua
Cuando dan un primer hervor se limpia bien la espuma y se le añade el compango bien lavado: panceta, lacón, chorizo y morcilla. Yo lo he troceado un poco.
Añadimos los ajos enteros sin pelar (así a quien no le gusten pueden quitarlos sin problemas) y cocemos a fuego bajo, en mi caso en una olla a presión, lo justo para que pite suavemente. A los 20 minutos las aparto, descompresiono, abro la olla y las "asusto" con un chorro de agua fría. Esto es para que el pellejo permanezca unido a la faba y no se salga. Movemos las olla en vaivén, nunca se mete cuchara ni paleta para no romper las fabes.
Probé de sal y estaban en su punto sin tener que echarle nada, Le pusé el azafrán natural molido y como aún no estaban suficientemente tiernas, sobre todo las carnes, les puse 12 minutos más a presión, fuego lento.
Las dejé en la olla sin fuego y sin abrir hasta que se descompresionó totalmente y al abrirla le puse como medio vaso de agua, De nuevo moverlas en vaivén y ya estaban en su punto.
Salen muchos mas buenas si se dejan reposar: Mínimo dos horas y también de un día para otro, que es como las prefiero. Recogen mejor todos los sabores y al calentarlas podemos hacer una nueva rectificación de agua y sal.
Junto con las fabes y el compango recibí un gran vino de Bodegas Arnegui Crianza.
También venía un paquete de unas deliciosas galletas artesanales hechas con una fina pasta de almendra marcona, bañadas con una cobertura de chocolate negro: Moscovitas de Rialto. Un postre estupendo para rematar este festín gastronómico.
Saborear una buena fabada es como si te transportaras a esas maravillosas tierras asturianas, todo un placer.
Debajo de esta receta está la opción de Dejar un Comentario. Espero recibir muchos con vuestras impresiones. Los contesto todos.